Muñoz, Inés
(por Mario López Martínez)
Nació en Trujillo (Cáceres), en fecha desconocida. Se casó con Francisco Martin de Alcántara, hermano de madre de Francisco Pizarro. Pasó a América con su marido cuando éste se unió a la hueste que Francisco Pizarro reclutó en Trujillo en 1529 en su viaje a España para conseguir la capitulación que le permitiera conquistar Perú. Primero recalaron en Panamá, a los dos años pasaron a Perú y fue una de las primeras mujeres españolas en vivir en Perú. Tras la fundación de la ciudad de los Reyes de Lima, se instaló en esa ciudad, convirtiéndose en una de las mujeres principales de la misma.
Tanto ella como su marido pertenecían al círculo más íntimo de Francisco Pizarro, hasta el punto de que Inés se ocupó de la educación de los hijos mestizos de aquél.
Cuando en 1541 fue asesinado Francisco Pizarro por Almagro "el mozo", se encontraba con él Francisco Martin de Alcántara que también fue muerto. En esos duros momentos se vio la entereza y valentía de Inés, que se enfrentó a los asesinos para evitar que profanaran los cadáveres. Después tuvo el valor de encabezar el cortejo fúnebre de ambos. Se ganó la admiración de toda la ciudad, tomó bajo su protección a los hijos de Pizarro y los envió a España.
Se casó en segundas nupcias con Don Antonio de Rivera, oriundo de Sevilla y uno de los hombres más ricos de Lima. Inés ya era rica antes de este matrimonio por las encomiendas que había heredado de su primer marido. Dedicó buena parte de su fortuna a realizar obras de caridad con una generosidad inmensa. También se ocupó de introducir especies hortofrutícolas del Viejo Mundo. Convenció a su marido para que llevara el cultivo del olivo al Perú, algo que realizó con éxito. Al enviudar por segunda vez, se retiró al convento de la Concepción, que había fundado ella misma en Jauja. Llegó a ser abadesa del convento y siguió mostrando interés asuntos prácticos, por los pues hizo montar el primer obraje de lana del Perú.